Roxana, una mujer de 21 años originaria de Oaxaca, fue vinculada a proceso por el delito de homicidio. Fue aprehendida por policías municipales de Ciudad Nezahualcóyotl cuando cargaba, en un costal el cuerpo de un hombre que, asegura, la había violado.
“Sé que seré condenada por defender mi cuerpo, por defenderme como mujer, por haber castigado a mi agresor, por no haberme quedado callada y por haber actuado».
En una carta difundida por el colectivo “Asamblea Vecinal Nos Queremos Vivas Neza”, Roxana pide justicia para ella y «todas aquellas mujeres que estamos presas por haber cometido el peor delito: ser mujer”.
En su misiva, entregada por su madre Ana Ruiz, quien les pidió ayuda después de ir al penal a visitar a su hija, Roxana “N” señaló que desde el 8 de mayo sabe que es conocida en los medios de comunicación como la mujer que fue detenida en flagrancia con un cuerpo dentro de un costal.
Fue violada, «pero nunca me realizaron pruebas periciales en psicología ni medicina. Me presentaron golpeada, pero no tomaron fotografías»
En el texto, esta joven originaria de Pinotepa Nacional, señala que «a los policías les dije que sí lo había asesinado, pero que él me había violado y yo solo quise defenderme. Los policías me hablaron con groserías e inmediatamente me trasladaron a la Procuraduría».
Precisó que una vez ante el Ministerio Público insistió en que fue violada, «pero nunca me realizaron pruebas periciales en psicología ni medicina. Me presentaron golpeada, pero no tomaron fotografías, no tomaron en cuenta mi declaración para que yo pudiera defenderme”.
Roxana está presa desde mayo pasado en el penal del Bordo de Xochiaca, en Nezahualcóyotl, Estado de México. Tiene un hijo de 4 años y llevaba 7 años viviendo en ese municipio, a donde migró para buscar empleo y salir de la pobreza en la que vivía. Vendía papas fritas frente a un supermercado.
Su próxima audiencia es el lunes 2 de agosto a las 14:00 horas, donde se definirá su situación jurídica.
De acuerdo con su relato, cuanto terminó de vender papas, un joven que trabajaba en el supermercado le invitó una cerveza y aceptó, pero cuando se iba a su casa un hombre que también trabaja en la tienda de conveniencia se ofreció a llevarla y la violó.
Te puede interesar: Detienen a hermanos por delito de desaparición de joven en Huajuapan de León
“Cuando llegamos a casa se puso necio, me obligó a dejarlo a entrar porque vivía lejos y dijo que si lo dejaba dormir en el cuarto. Insistió tanto que me asusté y me dio miedo, por tonta accedí. Lo dejé entrar, le puse una colchoneta en el piso y le dije que ahí se podía quedar, me acosté y pasados unos minutos se subió a mi cama y me empezó a quitar la ropa, me golpeó, me violó y yo estaba en shock, solo quise defenderme».
. Pasé momentos horribles, sentí su aliento, sus manos, cuando me penetró y solo quería que esto acabara. Le di un golpe en la nariz, comenzó a sangrar y me dijo: ‘ahora sí te vas a morir’”. Mencionó que en un descuido tomó una playera y lo asfixió.
Confesó que tras asesinarlo no supo qué hacer, lo metió en un costal y lo iba a dejar tirado en la calle Organillero, en la colonia Benito Juárez. Fue en ese momento que fue sorprendida por los policías