Italia está en crisis, y ante la situación el primer ministro, Mario Draghi, dimitió durante la reunión del Consejo de ministros; sin embargo, el presidente Sergio Matarella la rechazó y le solicitó presentarse ante el Parlamento para verificar si sigue contando con una mayoría para gobernar.
De acuerdo con los medios locales, Draghi dimitió al considerar que la mayoría de la unidad nacional que ha apoyado al Gobierno desde su creación se ha ido, y el pacto de confianza hacia el gobierno ha fracasado.
Tras el episodio en el Senado, Draghi se ha reunido con Mattarella en el Palacio de Quirinale, residencia oficial del presidente.
El presidente Mattarella rechazó la dimisión del primer ministro, en lo que parece un gesto para tratar de ganar tiempo hasta poder nombrar un nuevo Gobierno.
Según un comunicado de la Presidencia, Mattarella ha invitado a Draghi a reunirse de nuevo para mantener comunicaciones con el resto de los miembros del Gobierno y hacer balance de la situación generada tras los resultados de la votación de la cuestión de confianza en el Senado, recoge Adnkronos.
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Si Mattarella no es capaz de hallar una solución para que el gobierno de Draghi continúe, se espera que disuelva la legislatura y convoque a elecciones anticipadas, que podrían llevarse a cabo a finales de septiembre.