Habitantes del municipio de San Esteban Atatlahuaca manifestaron su rechazo a la violencia generada en la población durante los últimos días y exigieron la intervención de las autoridades del gobierno federal y estatal.
El presidente municipal, Heriberto Nicanor Alvarado Galindo, se deslindó de cualquier acto de provocación que hubiera generado el ataque a pobladores de Atatlahuca.
“Los habitantes de San Esteban Atatlahuaca vivimos temerosos, con miedo, todos los días, no hemos dormido y hemos pasados nostalgias con niños, niñas, mujeres, personas adultas”.
Alvarado Galindo destaca que siempre han alzado la voz y ha pedido la mesa de diálogo, así como la seguridad ante los gobiernos, pero, hay personas que no quiere esta seguridad; prefieren la violencia.
En conferencia de prensa subrayó que ni las comunidades ni los pueblos han retenido a la gente. “Nunca los hemos maltratados, nunca los hemos secuestrado, nuca hemos asesinado, no hemos quemado casas”.
Alvarado Galindo indicó que la primera agresión ocurrió durante la noche del 21 de octubre; un grupo armado ingresó a las comunidades de Ndoyonoyuji, Guerrero Grande y Mier y Terán; quemaron 25 casas y asesinaron a dos personas de la tercera edad.
Subrayó que el otro acto de violencia ocurrió el pasado sábado 23 de octubre; cuando un grupo de personas portando armas de fuego atacó a los habitantes de las comunidades de Guerrero Grande y Mier y Terán donde quemaron viviendas y al menos siete personas perdieron la vida.
El presidente municipal informó que ambos ataques dejaron un saldo de 59 familias desplazadas; hay alrededor de 160 personas que se encuentran viviendo en el albergue de San Esteban.
El munícipe denunció a Ambrosio Barrios, a un tal Valeriano y a la señora Sebastiana son los culpables de causar esas confrontaciones:
Por otro lado, responsabiliza al señor Salvador Basante Morales, Faustino Martínez Santiago, Juan Gabriel Hernández García y José Fabián Bautista Hernández que incitan siempre a la violencia.
Asimismo recalcaron la desaparición de Amalia Limón Xilitla, quien desapareció desde el 1 de octubre de 2021.
Por su parte, las autoridades del gobierno estatal implementaron un operativo coordinado entre la Secretaría de Seguridad Pública de Oaxaca (SSPO) y la Guardia Nacional; para garantizar la seguridad de la población.