Durante el Mundial de Qatar los estadios no venderán bebidas alcohólicas; la venta de cerveza fuera de los recintos, sólo se permitirá antes y después de algunos partidos, aunque esta información no se ha confirmado oficialmente.
Cabe recordar que la Copo del Mundo se celebrará por primera vez en un país musulmán. Los controles sobre el alcohol, lo que supone un reto único para los organizadores de un evento que suele asociarse con los aficionados a la cerveza y que está patrocinado por marcas cerveceras mundiales.
“En los estadios, los planes aún se están ultimando, pero la discusión actual es permitir a los aficionados tomar cerveza a la llegada y a la salida del estadio, pero no se servirá cerveza durante el partido, ni dentro del entorno del estadio”, dijo la fuente a Reuters.
Un documento fechado el 2 de junio al que tuvo acceso Reuters da la primera idea de cómo los organizadores planean manejar las demandas de unos 1.2 millones de aficionados al futbol, muchos de los cuales están acostumbrados a beber cerveza sin límites en los días de partido.
La relación del futbol con el alcohol ha sido durante mucho tiempo complicada. En el periodo previo a la Copa del Mundo de 2014, Brasil levantó la prohibición de consumir alcohol en los estadios, tras la presión del organismo rector, la FIFA.
Desde que el país árabe del Golfo obtuvo los derechos de organización en 2010, ha habido un interrogante sobre el alcohol en el torneo de este año. Aunque no es un estado “seco” como su vecina Arabia Saudita, el consumo de alcohol en lugares públicos es ilegal en Qatar.
Sin embargo, los aficionados que acudan al Mundial de noviembre podrán comprar cerveza durante un horario restringido en ciertas partes de la principal zona de aficionados de la FIFA en el parque Al Bidda de Doha, la capital qatarí.
Ha trascendido que habrá alcohol para unos 15 mil y 20 mil aficionados en una esquina en desuso del Club de Golf de Doha, a unos kilómetros de los estadios y de la zona principal de aficionados, según el documento.
Además, una parcela de arena rodeada por un muro de 3 metros y situada entre la entrada de entrega de un hotel y una planta de refrigeración de distrito se transformará en un local con capacidad para 10,000 personas que promete música tecno y alcohol, muestra el documento.