La Representación de la Pasión de Cristo en Iztapalapa se suma a la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad de la Unesco, reconocimiento que la coloca entre las expresiones del llamado Patrimonio Vivo, ligado a la creatividad, los conocimientos y el legado de las comunidades.
Este nombramiento abre una nueva etapa para esta tradición emblemática de la Ciudad de México, al activar medidas de salvaguardia orientadas a proteger su organización comunitaria, su memoria histórica y su sostenibilidad a futuro.
De acuerdo con la Unesco, la Representación en Iztapalapa es una tradición cuyo centro ocupa la población local de sus ocho barrios tradicionales. Se trata de una expresión que trasciende lo religioso y que, además del componente espiritual, contribuye al ejercicio de los derechos culturales y a la cohesión social en la zona.
📢La Representación de la Pasión de Cristo en #Iztapalapa se suma a la Lista Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la #UNESCO.👏🏿
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— UNESCO México (@UNESCOMexico) December 10, 2025
A lo largo de 180 años, esta representación ha sido un espacio donde se transmite conocimiento simbólico, espiritual, histórico, teatral, artesanal y escenográfico. Todo ello ocurre mediante procesos organizativos, comunitarios y familiares, en los que participan generaciones enteras y se combinan mecanismos informales y formales de enseñanza y aprendizaje.
La tradición no se limita al montaje anual de la Pasión de Cristo; detrás de cada escena hay un entramado de saberes comunitarios que incluyen:
- Conocimientos simbólicos y espirituales.
- Memoria histórica ligada al territorio y a la comunidad.
- Habilidades teatrales y de actuación.
- Oficios artesanales y escenográficos para la construcción de vestuarios y escenarios.
Estos saberes se transmiten de generación en generación, reforzando los lazos comunitarios y la identidad de los ocho barrios de Iztapalapa que sostienen la tradición.




