Este miércoles Laura Bozzo fue vinculada a proceso con prisión preventiva debido a un delito fiscal que supera los 12 millones de pesos. Incluso, la conductora tampoco pudo acreditar ante las autoridades cuál era su domicilio oficial.
La presentador de televisión es acusada por el delito fiscal conocido como depositaria infiel.
Ello, debido a que presuntamente vendió de manera indebida un inmueble que estaba embargado por el Servicio de Administración Tributaria (SAT), que garantizaba el pago de un adeudo por poco más de 13 millones de pesos.
La conductora originaria de Perú podría pasar de tres a nueve años en prisión por ese delito.
A petición de la Fiscalía General de la República (FGR) y por el juez a cargo de la audiencia, se ordenó prisión preventiva justificada.
La conductora no pudo acreditar su domicilio permanente ante las autoridades, lo que representa un riesgo de fuga.
Esto significa que Laura Bozzo deberá presentarse por su propio pie en el Centro Penitenciario y de Reinserción Social de Santiaguito, en Almoloya de Juárez en las próximas horas.
La disposición se justifica luego que la conductora no pudo acreditar su domicilio permanente ante las autoridades, lo que representa un riesgo de fuga.
Hace tres meses, Bozzo había solicitado un acuerdo reparatorio para pagar el adeudo fiscal y, con ello, evitar ir a la cárcel.
Sin embargo, no se trata de la primera vez que Laura Bozzo presenta problemas con la ley.
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En 2006, en Lima, Perú, fue declarada culpable por los delitos de asociación ilícita para delinquir y peculado “en agravio del Estado y la sociedad”.
En julio del 2002 autoridades en Perú ordenaron orden de arresto domiciliario contra Laura Bozzo, por presuntos vínculos con el también procesado Vladimiro Montesinos. Las conductora estuvo tres años dentro de un foro de televisión.