En la mañanera del lunes pasado, López Obrador sorprendió con la declaración en torno a la renuncia del subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía Berdeja. Ni el adiós le dio al presidente y mediante una carta oficializó su salida del gabinete de seguridad.
Cabe mencionar que López hizo todo lo posible para que no se fuera y quitárselo de enfrente al senador Guadiana, que ganó la encuesta y será el abanderado a la gubernatura de Coahuila, pero a Mejía Berdeja se la tenían prometida y en un acto de desobediencia competirá por el Partido del Trabajo.
Aquí se lo he dicho, el ocaso de la administración de López Obrador ya se siente con fuerza y su debilidad también. Es por eso que un funcionario de primer nivel como Ricardo Mejía Berdeja se atreve a ir en contra del dueño del partido. De Palacio Nacional me cuentan que el subsecretario trabajó mucho en eso de la candidatura y que cada que podía le hablaba al oído al presidente. Pero los intereses siempre estuvieron puestos en el senador y empresario Armando Guadiana Tijerina al que le deben mucho en aquella entidad.
Ya sabemos que además de las famosas encuestas como método de elección, hay que llenarle el ojo al presidente y de paso a Mario Delgado, líder de Morena. Parece que había un acuerdo con Mejía Berdeja y al romperse se fue muy dolido con los mencionados. Ello es una muestra de que a López y a los suyos le va a costar mucho trabajo conservar la unidad de su movimiento en lo sucesivo; abre la posibilidad para que otros sigan el mismo camino y se le insubordinen a su líder máximo.
También se habla de una posible estrategia par fragmentar el voto en Coahuila donde la distancia con el PRI es considerable, pero la información que sale de Palacio Nacional es sobre un enojo de López con el susodicho. Seguramente no les gustan los mensajes que se mandan a las “corcholatas” y veremos qué pasa en el Estado de México con el PT y su candidato.
Los dimes y diretes no se han dejado esperar y es que Mejía Berdeja dijo que Mario Delgado es un corrupto, traidor a la democracia y que se ha dedicado al ‘mercadeo’ de candidaturas. Además, le dijo al presidente que las encuestas son instrumentos, pero no son la Biblia, en tanto el líder nacional de Morena lo acusó de estar lamiendo las botas a los Moreira, que dice combatir, y a Riquelme.
Hasta el mismo Ricardo Monreal, que no cuenta con los afectos del presidente, se ha pronunciado en contra de esa candidatura. Saben que la soberbia los puede llevar a la derrota. Pero también se pone en entredicho el método de elección que utiliza y utilizará Morena para elegir a sus candidatos y que desde ahora sabemos que no favorecerá al zacatecano.
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El tiempo pondrá a todos en su lugar y veremos si Morena es capaz de ganar Coahuila o si Mejía Berdeja tenía razón y se puede ganar desconociendo al mismísimo López Obrador y con otra camiseta, se antoja difícil… pero mejor ahí la dejamos.
Entre Palabras
Luz Elena Chávez, autora de El Rey del Cash, denunció persecución por parte de López Obrador, Sheinbaum y su fiscal. ¿Está garantizada la libertad de expresión y la seguridad de los periodistas?
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Hasta la próxima.